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    Las frases de la página principal están recopiladas en el texto Contra periodistas, del escritor y periodista Màrius Carol. Editorial edhasa.

    Gobierno ataca con política de martillo a Asociaciones de Desarrollo y les pega un baile

    Por Luis Eduardo Araya Hidalgo.

    
    El autor es abogado de profesión y Egresado de la Escuela Libre de Derecho de Costa Rica, Docente Universitario, con experiencia en el Sector Comunitario, Presidente de la Asociación de Desarrollo Integral de Quebradilla, Central, Cartago.

    Más de 3 mil Asociaciones de Desarrollo colaboran en la atención de la alerta sanitaria COVID-19 sabiendo que el enemigo más letal de sus comunidades no es el virus que se propaga sino el Gobierno de la República que de frente nos atiende y por la espalda nos ataca nuestros presupuestos y con ello se van nuestros proyectos y planes de trabajo.

    Recortar Ȼ6 mil millones del presupuesto de la República, recursos cuya finalidad son fortalecer el sector comunal, es la más clara agresión de dar un martillazo a lo que significaría el cierre técnico de muchas asociaciones de desarrollo.

    Se lo olvidó al señor Presidente de la República, que es el sector comunal el que atiende las necesidades locales en las comunidades, cuantos salones comunales, canchas de futbol, cementerios, parques, áreas verdes y de ornato  entre otras dependen de esos recursos para su funcionamiento y mantenimiento.

    Las medidas sanitarias tomadas por el Ministerio de Salud  han afectado las actividades ordinarias y por ende no hay alquileres de los salones comunales, canchas de futbol entre otras actividades de nuestro sector lo que implica que no tenemos liquidez al no tener fuentes de ingreso.

    Al día de hoy el gobierno no nos ha girado un sólo colón para atender la emergencia. Aun sin ingresos debemos tener las instalaciones comunales listas para el uso de la colectividad y para la satisfacción del interés público por un deber ético y moral con la sociedad.

    El sector comunal se ha puesto a disposición del Poder Ejecutivo para trabajar y atender la emergencia desde las primeras líneas de batalla con perifoneos, entregas de ayuda humanitaria, campañas de recolección de víveres, prestamos de inmuebles, equipos, muchos de nuestros salones comunales son los albergues que utiliza la Comisión Nacional de Emergencias y demás cuerpos de socorro.

    Las Asociaciones de Desarrollo no tenemos que estarle rogando a un Ministro de Hacienda ni a un Presidente de la República para que nos depositen los recursos que por LEY deben ser asignados, o es que el ordenamiento jurídico costarricense es de índole dictatorial, donde no importa la legalidad de la norma sino lo que diga un tomador de decisiones irrespetando la legalidad que por juramento indico respetar.

    Las Asociaciones de Desarrollo merecemos respeto, estamos ad honorem sin dietas, sin gastos de representación, sin estrenar flotillas vehiculares en media crisis fiscal y pandémica. El sector comunal atiende las necesidades que el gobierno central y los gobiernos locales muchas veces desconoce. Con mucho respeto solicitamos revierta esa decisión tan errada.

    El país lo sacamos con diálogo y trabajo serio con los distintos sectores de manera que lo conversado y acordado en las mesas de diálogo sea homologado con acciones, ya basta de atolillo con el dedo. El sector comunal necesita los recursos que por legalidad le competen. No es un favor al sector sino el cumplimiento de un mandato legal.

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