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    Las frases de la página principal están recopiladas en el texto Contra periodistas, del escritor y periodista Màrius Carol. Editorial edhasa.

    Solís desarma a diputados que quisieron ligarlo con la filtración del narcotráfico

    Al término de su comparecencia de este martes 21 de setiembre en el Congreso, ante la Comisión especial que investiga la posible penetración del narcotráfico en la zona sur del país, el expresidente Luis Guillermo Solís posiblemente esbozó una sonrisa de satisfacción por el resultado de la audiencia.

    El exmandatario salió bien librado; incluso, se puede afirmar que no pasó un solo momento de angustia, tensión o inquietud durante los casi 90 minutos que duró su presencia (vía virtual desde la ciudad de Miami, Estados Unidos).

    Además, aseguró que su comparecencia estuvo basada en una nota periodística que pretendió involucrarlo junto con el exministro de Vivienda y Asentamientos Humanos, Rosendo Pujol, en actos ilícitos y cuyo autor nunca lo buscó para obtener su versión de los hechos.

    Solís rechazó contundentemente dicha insinuación, pues “constituye una mentira que, como todas las que infundadamente lanzan cargos contra funcionarios públicos sin aportar pruebas fehacientes causan grave daño a la democracia costarricense”.

    El exmandatario enfatizó sobre cuatro puntos fundamentales:

    1. Nunca promovió indebidamente proyecto de vivienda alguno, ni en Corredores ni en ninguna parte del país.
    2. Nunca modificó decretos para favorecer la construcción específica de un proyecto de vivienda.
    3. Nunca ejerció presiones sobre las autoridades municipales con ese propósito.
    4. Nunca pretendió usurpar las competencias municipales.

    Luego de su alocución, la única que intentó acorralar a Solís fue la diputada de Restauración Nacional, Floria Segreda, quien se empeñó en demostrar que el fallido proyecto de vivienda social San Agustín, impulsado por el fallecido Luis Cartín Herrera, vinculado con una banda de narcotráfico, fue apoyado por el exmandatario.

    Cartín promovió mediante el Concejo Municipal y ante el MIVAH la reforma al decreto 22407-MOPT-MIVAH como medio para desaparecer las objeciones técnicas que recaían sobre dicho proyecto. Ante esto, Solís Rivera recordó que este decreto no fue modificado y permanece vigente al día hoy, tal cual fue emitido en 1993.

    En cambio, los legisladores oficialistas Luis Ramón Carranza, Carolina Hidalgo y Catalina Montero dieron su respaldo a la gestión de Solís en este caso en particular. Es más, luego de aprobar las acciones de Solís en torno al caso, Carranza manifestó que “la comparecencia era innecesaria cuando estamos dejando otros temas de lado”.

    Hidalgo expresó que le parecía lamentable que se convocara a una audiencia basados en la interpretación o consideraciones de terceras personas.

    De igual forma, el presidente del Partido Republicano Social Cristiano, Otto Roberto Vargas se limitó a consultarle si durante su gestión había recibido alguna alerta por parte de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) sobre la posible incursión del narcotráfico en las esferas políticas del país, y cómo instruyó a sus ministros de ese entonces para no tener contacto con este tipo de personajes.

    Por su parte, la liberacionista Karine Niño solo le preguntó cuál era su criterio acerca de que funcionarios de su administración mantuvieran reuniones con el desarrollador Cartín Herrera, además de solicitarle información acerca de las acciones que se tomaron en su gobierno para evitar la infiltración del narco en el ámbito político.

    La verdiblanca terminó reconociendo que, así como Solís Rivera no tuvo alertas de sus agencias de seguridad sobre la vinculación de estos personajes con el crimen organizado, ellos -diputados- tampoco las tuvieron cuando se quiso armar un escándalo por las visitas de gente ligada a esta organización delictiva a la Asamblea Legislativa.

    Careo con Segreda

    Como dijimos anteriormente, la restauracionista Floria Segreda fue la más incisiva en sus cuestionamientos a Solís, pero aun así sus argumentos fueron bien respondidos por el exmandatario.

    Por ejemplo, la congresista le interrogó sobre si él instruyó al exministro de Vivienda y Asentamientos Humanos, Rosendo Pujol para favorecer el proyecto San Agustín. Además, le indicó que el exjerarca del Mivah declaró públicamente que dicha iniciativa contaba con el respaldo del expresidente.

    Entonces, Solís Rivera respondió: “No giré instrucciones para favorecer ese proyecto. La línea general de la administración fue favorecer todos los proyectos, en todo el país, si eran técnicamente viables y jurídicamente sostenibles. Si se dieron las manifestaciones del señor ministro fue en ese marco general de aplicación para todos los casos en donde intervinimos en procura de vivienda social para las personas más necesitadas, pero no para favorecer a un proyecto específico”, recalcó.

    Como Segreda insistió una y otra vez en que Pujol dijo públicamente que el proyecto San Agustín contaba con el respaldo del presidente, Solís siempre le reiteró le respondió con lo expresado en el párrafo anterior.

     

     

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