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    Las frases de la página principal están recopiladas en el texto Contra periodistas, del escritor y periodista Màrius Carol. Editorial edhasa.

    (Videos) Regidor municipal de San José: “Ya sabemos que aquí hay ocho votos fijos en cualquier dictamen”

    • ¿Por qué la mayoría de votaciones en el Concejo Municipal de San José terminan 8 votos a favor y 3 en contra?
    • Un nuevo enfrentamiento entre Diego Miranda y el alcalde Johnny Araya se produjo en la sesión del Concejo Municipal por un crédito de ₡5.400 millones.

    Una vez más, la sesión ordinaria del Concejo Municipal de San José vivió un agrio enfrentamiento entre el regidor Diego Miranda y el alcalde Johnny Araya, quien retornó a sus labores, luego de su segunda suspensión (esta vez 30 días) por un supuesto pago irregular de ¢253 millones a la empresa que suministra el servicio de parquímetros en la capital.

    Esta ocasión, el motivo de la disputa fue un crédito por ₡5.400 millones con el Banco de Costa Rica, para concluir los proyectos de Barrio Escalante y calle 33 transversal 24.

    Finalmente la votación para darle el aval a la operación crediticia no se llevó a cabo. En su lugar se trasladó el caso a la Comisión de Hacendarios que, posiblemente, el próximo martes resuelva y lo devuelva al plenario.

    Por esta razón, el regidor Diego Miranda, del Partido Juntos por San José, se mostró en desacuerdo por la aprobación del endeudamiento; entre otras razones, porque recordó que la experiencia con otro empréstito con el Banco Mundial salió mal, a pesar de que ellos habían alertado sobre los riesgos del mismo.

    Diego Miranda atacó fuertemente al alcalde de San José, Johnny Araya.

    Miranda también la emprendió contra el alcalde al decir que cambió su visión sobre el proceder de la Contraloría General de la República, pues en aquel momento cuando se presentaron cuestionamientos sobre el préstamo, Araya dijo ser un “perseguido político”.

    Agregó que ese contrato con el Banco Mundial tenía múltiples inconsistencias y fue elaborado en la administración de Johnny Araya y además contó con su venia y su firma, sostuvo Miranda.

    Asimismo, denunció que, lastimosamente, en las instancias políticas de la Municipalidad de San José no se puede debatir, porque “ya sabemos que aquí hay ocho votos que están fijos en cualquier dictamen”, manifestó Miranda.

    Estos votos a los que se refiere el representante del Partido Juntos por San José, son los siguientes: Alexander Cano Castro, Patricia Marín Gómez, Reina Acevedo Acevedo y Lenin Barrantes Villareal, todos del Partido Liberación Nacional (PLN); José Zamora Cordero (Alianza por San José), Fernando Jiménez Debernardi (Partido Republicano Socialcristiano), Jorge Monge Cabezas (PAC quien se declaró como independiente) y Donald Leiva Hernández (PUSC).

    Quienes usualmente se oponen a este grupo son además de Diego Miranda (Juntos por San José), Andrea Rudín (PAC) y Tatiana Bonilla (Nueva República).

    Curiosamente, la última votación que terminó 8-3 fue la sexta modificación presupuestaria del año 2022.

    Acostumbrado a los ataques

    El alcalde de San José, Johnny Araya, dijo estar acostumbrado a los ataques del regidor Diego Miranda.

    Por su parte, el alcalde Johnny Araya se defendió de las manifestaciones de Miranda al decir que “ya estoy acostumbrado a los ataques de Diego. Casi se ha convertido en el lead motiv de su gestión en la Municipalidad de San José”.

    El funcionario rechazó la responsabilidad de la decisión de terminar el crédito con el IFC (Corporación Financiera Internacional por sus siglas en inglés) una organización del Banco Mundial, ni tampoco de la de iniciar otro con la banca nacional, pues ambas fueron acordadas durante el tiempo en que estuvo ausente del municipio.

    Además, le pidió a Miranda no poner en boca suya expresiones que nunca ha usado, como la de “perseguido político”, pues adujo no tener ese complejo.

    Contrario a lo que sostiene el regidor, Araya asegura haber actuado con transparencia, pues admite su equivocación al pensar que la Contraloría refrendaría el contrato con el Banco Mundial, y al percatarse de su error de inmediato pidió la derogación del acuerdo.

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