Sector literario: Propusimos, ¡pero también se nos dijo que No!

Por Evelyn Ugalde Barrantes. Editora y promotora literaria. Fundadora de ClubdeLibros.

“Desde que se empezaron a anunciar las famosas celebraciones del año Bicentenario, tanto el Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ) como el mismo gobierno de la república mencionaron que esas actividades significarían una posibilidad de apoyo a la reactivación económica de un sector cultural en crisis y en pandemia.

Esto dijeron en sus redes sociales: “El MCJ promueve ante las contrapartes del Bicentenario que se prioricen las actividades que contribuyen al encadenamiento, protección y reactivación de los trabajadores de la cultura y del talento nacional (artístico, técnico, artesanal) que favorezca el desarrollo de todas las narrativas y contenidos que pongan en valor la Conmemoración“.

La misma ministra de Cultura y Juventud, Sylvie Durán, hace más de un año dijo además que se “podían enviar las propuestas y que se iba a valorar incluirlas en la programación general”.

Las esperanzas y la enorme necesidad de todo un sector hizo que instancias y colectivos como Mujeres del Gremio Literario empezáramos a mandar propuestas y a pesar de que nunca explicó el cómo y dónde se deberían mandar las posibles actividades o proyectos, decidimos creerle y buscamos varias posibilidades para apoyar a un sector literario abandonado.

El abandono es desde antes de la pandemia

Empecemos por los números. El apoyo del MCJ actualmente al sector literario independiente es de solamente ¢46 millones 800 mil colones al año, que se le da a 13 ganadores (en el sector del libro somos cerca de 4 mil) de las Becas de Estímulo de las Artes Literarias, entregadas por el Colegio de Costa Rica. Ese beneficio va dirigido específicamente a escritores, promotores, y gestores culturales y reactiva muy poco a editoriales y nada a las librerías que no tienen representación en ninguna de las categorías de participación.

Mientras que en otros países se han dado ayudas al sector editorial independiente para que pueda subsistir en pandemia, principalmente enfocadas en la compra de libros de autores y editoriales nacionales, aquí por el contrario se eliminaron los presupuestos del año pasado y de este para compra de libros, tanto desde el SINABI (Sistema Nacional de Bibliotecas) del MCJ, como del departamento de Bibliotecas Escolares del MEP.

Este panorama ha sido criticado fuertemente en las instancias respectivas y bueno se espera que el próximo ya se tenga un presupuesto de nuevo para que el SINABI compre libros de 22 millones de colones aproximadamente. El detalle es que está en la partida de “compra de papel” así que esperamos que no sea todo usado en compra de papel para impresora o lo que es peor, en papel higiénico.

Además el Colegio de Costa Rica anunció la semana pasada de forma muy breve y sin profundizar, que tiene de un presupuesto extraordinario, la suma de ¢40 millones de colones y que en los próximos días explicará a quiénes y de qué forma se aplicará la nueva convocatoria. La convocatoria actual vence hasta noviembre y los proyectos ganadores recibirán sus dineros hasta marzo o abril del 2022.

Pero el mayor de los problemas es que el sector del libro lleva meses sin tener una feria del libro que realmente ayude a mover su economía, debido a que el año pasado la Cámara Costarricense del libro decidió hacerla virtual y el MCJ dijo que no iba a participar. Eso significó que el presupuesto que generalmente es entre 35 millones a 60 millones, se convirtió en solamente ¢20 millones que se usaron para realizar el proyecto Aquí Cultura Literario, con apoyos de ¢60 mil, ¢150 mil y ¢200 mil colones a los beneficiarios.

Este año, con un panorama peor que el del año anterior, y con 2 años sin feria presencial, decide la Cámara Costarricense del Libro no hacerla de ninguna de las dos modalidades y además el MCJ no dice qué hará con ese presupuesto que se tiene cada año.

Por eso presentamos la siguiente propuesta:

La propuesta

Luego de que Ministerio de Cultura decidió no apoyar la Feria del Libro virtual del año pasado y este año no hiciera nada con la decisión, -a mi parecer, desafortunada-, tomada por la Cámara Costarricense del Libro de cancelar la Feria Internacional del Libro decidimos enviarle desde el Colectivo Mujeres del Gremio Literario esta propuesta que en pocas palabras consistía en lo siguiente.

Con el presupuesto que no iba a utilizar el MCJ para apoyar al sector literario (que por cifras de años anteriores calculamos que es de más o menos unos ¢35 millones) hacer una Feria del libro Bicentenaria en el CENAC donde solo asistieran las 63 bibliotecólogas de las bibliotecas públicas del SINABI del MCJ, y con ese dinero pudieran comprar libros de los autores, editoriales, librerias pequeñas y medianas, enfocadas en lo nacional.

Las compras iban a realizarse con protocolos sanitarios, apoyando a toda la cadena de valor y principalmente dirigidas no solamente a la reactivación de todo un sector sino que esos libros -que más o menos calculábamos iban a ser unos casi 6000 libros– serían llevados a comunidades, con lectores de todas las edades y por todo el país.

La respuesta del MCJ fue confusa, pero negativa. Primero dijeron que no por asuntos de que la Cámara tiene registrada la marca de Feria Internacional del Libro y no entendemos que tiene eso que ver ya que le dijimos claramente a la Sra. Ministra Durán que la idea era hacer una feria que se llamara Feria Bicentenaria.

Luego dijeron esto que aun no podemos interpretar y ver su coherencia con su discurso de reactivación: “por principio de legalidad presupuestaria y en estricto cumplimiento de los parámetros del Plan Nacional de Desarrollo, así como de los fines institucionales y propuestas de reactivación, el presupuesto institucional o del bicentenario, no debe pensarse como una fuente exclusiva o sostenible de reactivación de los sectores.”

Y por último nos mandaron a llevar la propuesta a las mesas sectoriales, a pesar de que ella misma, la titular del MCJ, quien escribe la respuesta negativa, dice que las mesas no son para eso: “porque a pesar de que, en las mesas, no se busca resolver o producir eventos”.

Además ellos mismos saben que en dichas mesas se está trabajando “únicamente” en un plan sectorial. Y además y aquí agrego yo, “¿para qué llevarlo allí, si ya su respuesta fue no?”. Bueno, muy estilo de esta administración, le encanta vernos perder el tiempo.

Un tiempo en el que urge ver respuestas y que ya a mediados de julio 2021 a más de un año y 5 meses que empezó esta pandemia y nada. Cada día que pasa es un paso más que nos acerca a la desaparición de todo un tejido cultural literario que trata de sobrevivir claro, pero sin apoyo de un estado al que se le pagan impuestos, pero que no da a cambio nada…o muy muy poco.

Urge ya no solo reactivar al sector sino también “resucitarlo”.

Esperemos que de verdad entiendan las autoridades que al sector le urge reactivarse y hasta cierto punto “resucitarse”, porque han desaparecido editoriales, imprentas, y librerías físicas como la querida Duoluz, y otras como Infinito han pasado a ser virtuales.

También hemos visto cómo editoriales estatales han dejado de recibir libros nuevos en este año, y las independientes han bajado en un 60% su producción. En cuanto a ventas, librerías, escritores autopublicados y editoriales pequeñas con las que hemos conversado nos aseguran que sus ventas han bajado en un 90% en este año y medio de pandemia y que ya veníamos en crisis desde que el MCJ decidió -muy a pesar también según mi opinión- trasladar de fecha la Feria Internacional del Libro 2019 para el mes de mayo para acomodarlo a la conveniencia de Centroamérica Cuenta.

¡Ya tenemos dos años y 3 meses sin ferias del libro y será mucho más!

Y es que todo esto evidencia que el sector literario no ha estado abandonado solamente en pandemia sino desde antes, por ejemplo, son 5 años de estar pidiendo un espacio para la venta de libros en el Festival de las Artes y la respuesta de esta administración actual siempre ha sido: “para eso tienen la Feria”, ¡como si solo en ese mes se necesitara acercar a los lectores a los libros!

Esta misma administración que desapareció hace algunos años, no sabemos cómo, el presupuesto que se daba para la delegación costarricense en la Feria Internacional del libro de Guadalajara, la más grande de América Latina.

Pues ahora en pandemia, señores del Ministerio de Cultura, no hay ni Feria librera en el FIA, ni tampoco Feria Internacional del libro. ¡Decepcionante!

Esperemos que de verdad las autoridades del próximo gobierno logren reactivar y resucitar al sector literario costarricense, porque ya con este yo no tengo ninguna esperanza.

La falta de voluntad ha sido total y bueno, esperemos tener mejores noticias a partir de mayo del próximo año.

Por último y no por eso menos importante, señoras y señores lectores, apoye a los autores, editoriales y librerías nacionales comprándoles por vías virtuales o presenciales en pequeña escala … y entre todos lograremos salir adelante.

¡Es gracias a ustedes que estamos aquí!  Y seguimos adelante, por ustedes, los lectores”.

La autora de este artículo, Evelyn Ugalde, participó junto a la escritora Arabella Salaverry Pardo en la transmisión del pasado 6 de julio ¿Cómo sobrevive el sector literario a un año de la pandemia? producido por el medio de comunicación de la Universidad Estatal a Distancia, Onda UNED.